Lidera la Asociación de Padres de Niños con Cáncer del Instituto Oncológico del Oriente Boliviano, es residente cubana ydecidió quedarse en el país para que su hijo menor pueda recibir el tratamiento necesario.

24 de julio de 2024, 15:00 PM
24 de julio de 2024, 15:00 PM

Ana Machado fue elegida presidente de la Asociación de Padres de Niños con Cáncer del Instituto Oncológico del Oriente Boliviano, una residente cubana de 33 años que ha encontrado en Bolivia su misión de vida.

.Ana Machado. Incansable en su papel de voluntaria
.Ana Machado. Incansable en su papel de voluntaria

Madre de Yordi y Yordan Córdova Machado, de 12 y 8 años, decidió quedarse en el país para que su hijo menor, diagnosticado con linfoma no Hodgkin, pudiera recibir el tratamiento necesario. Su fe inquebrantable y el apoyo de diversas instituciones y voluntarios que apoyan a los pacientes del Oncológico, le permitieron no solo cumplir con el tratamiento de su hijo, sino también identificar y atender las necesidades de otros niños en situaciones similares.

Guerrero. Yordan empezó su lucha a los 6 años
Guerrero. Yordan empezó su lucha a los 6 años

Durante su peregrinaje, Ana se dio cuenta de las múltiples carencias que enfrentan las familias de niños con cáncer. Motivada por su experiencia personal y el deseo de ayudar a otros, se involucró activamente en la Asociación de Padres de Niños con Cáncer. Su liderazgo ha sido fundamental para que muchas madres encuentren el apoyo necesario para seguir adelante. Hoy, Ana lidera con gratitud y determinación la Asociación, agradeciendo constantemente al voluntariado y a las manos amigas que colaboran en las campañas solidarias para los niños que sufren de cáncer.

¿Cuándo empieza su trabajo voluntario?

Es invaluable toda esa ayuda a las madres de niños con cáncer, por eso yo al ver las necesidades que tenían abogaba por ellas, las animaba a que sigan su tratamiento, y así inició la Asociación de Padres de Niños con Cáncer del Hospital Oncológico. Yo soy una ciudadana cubana, ya llevo 8 años en este país. Mi niño menor casi cumpliendo 6 años fue diagnosticado con cáncer y así tuve la fe y decidí que él reciba su tratamiento en Santa Cruz. Ahora está en fase de recuperación y esperando que la enfermedad no regrese. Soy un ejemplo vivo que gracias a la solidaridad del voluntariado mi niño pudo continuar en el Oncológico. Al ser ciudadano cubano y teniendo su residencia permanente en Bolivia, el Seguro Universal de Salud en Bolivia no le cubre sus tratamientos, salvo en sala de emergencia.

Valoro todas las ayudas solidarias

Lo digo porque yo fui beneficiada y sé lo que cuesta pagar el tratamiento, la internación y atención de las enfermeras, no hay economía que aguante. Gracias a mi familia y al voluntariado pude salir adelante. Gracias a Dios mi niño está bien, sigue aún bajo cuidados por su tratamiento. En tanto yo continúo como voluntaria para hacer posible que la solidaridad nunca se acabe para los niños.

Trabajamos por la Asociación de Padres, ahora nos encontramos gestionando la personería jurídica que aún está en proceso para que nuestras acciones puedan ser avaladas.

¡Las campañas son nuestra esperanza!

Como voluntaria en la Asociación de Padres puedo avalar que las acciones solidarias son la única esperanza que tienen las madres del Oncológico para cubrir alguna necesidad de sus niños que se encuentran en tratamiento, porque lamentablemente la enfermedad del cáncer es muy costosa y la economía no alcanza para poder comprarles un par de zapatos o una mudada de ropa.

Me llena mucho de gozo que las madres puedan beneficiarse de las campañas que realizan las agrupaciones y las empresas que aportan con acciones de responsabilidad social.

Las dificultades son inimaginables

Los padres casi siempre pierden sus trabajos por estar a tiempo completo en el hospital acompañando a sus niños, en ningún trabajo les permite faltar varios días, y así ellos tienen que hacer muchas cosas para salir adelante por el sustento de sus familias.

Todos los días tienen que luchar con esta enfermedad que es tan duro que no distingue las situaciones económicas, sobre todo a los más pobres de la sociedad. Agradezco a todas las personas que se suman a esta causa que nunca es suficiente, ya que cada día aumentan más los pacientes con cáncer, tanto en adultos como en niños y al tener tantas dificultades de adquirir los medicamentos que no cubre el Seguro Universal de Salud (SUS).

La valiosa ayuda del voluntariado

Todo lo que tenemos en pediatría, tanto en construcción, en mobiliario y varios equipos, como también en medicamentos, es gracias al corazón solidario del voluntariado. La Asociación de Padres gestiona varias ayudas que le puedan llegar a los niños que se encuentran en tratamiento, como estudios clínicos y recetas, entre otros, sino fuera por esa solidaridad el área de pediatría no pudiera estar en pie. Gracias a esa ayuda y la voluntad de los profesionales, hay menos mortalidad infantil del cáncer.