Hacer dieta en familia, ¡vale la pena!
Después de las fiestas conviene dar un giro diferente e iniciar un plan de dieta sana y equilibrada y un estilo de vida saludable.
Rita Medina
NUTRICIONISTA. DIETISTA
Primeramente, hay que depurar el organismo con un plan de restauración que puede perdurar y ser un regalo valioso para gozar una mejor apariencia, más rendimiento intelectual y físico, y así iniciar un estilo de vida saludable.
Pensar: ¡Juntos lograremos cumplir los buenos propósitos!
No se trata de hacer dieta estricta sino de ir cambiando poco a poco nuestros hábitos de vida, que nos garantice más salud, calidad de vida y una tercera edad sin consecuencias derivadas de malos hábitos alimenticios.
Se colaboran y comprometen en familia, en pareja, los hijos, a conseguir sus metas, como aliciente para tener mirada común buscando un solo objetivo: vivir con salud.
Metas realistas
Parte esencial de cualquier relación es la comunicación y esto es aún más necesario cuando se empieza un nuevo estilo de vida y se aprende a comer bien.
El primer paso para obtener buenos resultados en este proceso es hablar sobre lo que quiere conseguir cada uno; desde perder peso, tonificar o simplemente tener más energía. Una vez claro esto podrán buscar y descubrir formas de hacerlo juntos.
¡Somos diferentes!
Es importante que sepan que uno podría perder peso más rápido que el otro. En el caso de las mujeres somos las que más tiempo tardamos en hacerlo.
Esto se debe a que los hombres tienen niveles más altos de testosterona y más masa muscular, por lo que su metabolismo es de un 5 a 10 por ciento más rápido que el de las mujeres.
Realice un plan alimentario en conjunto con un menú variado
Tomar en cuenta aquellos ingredientes o alimentos que alguno desea integrar o dejar de lado es parte clave en la comunicación. Además, es una de las mejores maneras de que en familia se comprometan al mismo nivel. Ahora bien, ir al mercado e incluso cocinar juntos es una forma de mejorar su presupuesto familiar.
Motivación con nuevos cambios progresivos, comiendo bien
Sea la pareja y sus hijos, niños y adolescentes, deben motivarse sin exagerar, es mejor que realicen una tabla de metas y pequeños pasos para que la coloquen en la puerta de la heladera.
La idea es aprender a comer tomando en cuenta un modelo de plato saludable con sus proporciones de alimentos (carnes, granos y verduras), siguiendo nuestro ejemplo en esta página.
Modificar sus rutinas
No solo considerar la alimentación dando ejemplo a los niños, incorporar también la práctica diaria de ejercicios, hidratación, beber agua varias veces al día (hasta 2 litros), dormir antes de las 10 de la noche y, sobre todo, controlar el estrés.
Recordar las rutinas que tienen planeadas para cada día, ayuda a construir nuevos lazos de comprensión y comunicación. Salir a caminar o correr en pareja significa cambiar las costumbres de quedarse en casa los fines de semana.
En familia, sean considerados
Los cambios repentinos de hábitos suelen afectar en el carácter, sean tolerantes que con el tiempo esto se irá pasando, sean comprensivos y acompáñense, porque, sin duda, ¡los resultados valdrán la pena!
