Una emprendedora apasionada por la salud y la cocina. Hace tres años creó Keto Kenny, una línea de productos artesanales libres de azúcar, gluten y conservantes. Logró perder 20 kilos al adoptar una alimentación más saludable.

26 de junio de 2024, 15:00 PM
26 de junio de 2024, 15:00 PM

En un rincón de Santa Cruz, surge una historia inspiradora que trasciende los límites del bienestar personal. Kenny Barrientos Nicodemo, con 40 años de vida, no solo ha transformado su propio cuerpo, sino también el destino de quienes lo rodean. 

Ella se define como una emprendedora apasionada por la salud y la cocina. Hace tres años, creó Keto Kenny, una línea de productos artesanales libres de azúcar, gluten y conservantes. 

La inspiración detrás de este emprendimiento fue su padre, quien durante años luchaba contra la diabetes y, además, le prometió hacer un cambio de vida por su salud. Así logró perder 20 kilos al adoptar una alimentación más saludable, y todo sin azúcar.

Sin límites

Su producto estrella lleva siete semillas con linaza y harina de coco
Su producto estrella lleva siete semillas con linaza y harina de coco


Su emprendimiento, Keto Kenny, ofrece productos elaborados con amor. “Evitamos la contaminación cruzada por gluten, que es imprescindible para que los alimentos sean adecuados para los celíacos”, dice.

Hace todo a pedido y entregado a domicilio o al lugar de trabajo. Desde las 17:30 sus creaciones artesanales llegan a manos de aquellos que buscan una alternativa consciente para su alimentación.

Motivación

La motivación de Kenny se origina en una experiencia personal muy triste, compartida por muchas familias. Sus padres, los profesores Freddy Barrientos y Delfina Nicodemo, padecían enfermedades crónicas como hipertensión y diabetes. 

La complicación de la diabetes llevó a su padre a la diálisis, fue durante ese tiempo difícil que le hizo la promesa de cuidar su vida, tendría que hacer una dieta saludable para perder peso y dejar de consumir azúcar.

Emprendedora

Pan sin gluten. Con linaza y chía
Pan sin gluten. Con linaza y chía

Kenny tomó en serio esa promesa. Investigó, se formó en cocina saludable, realizó cursos con profesionales de Santa Cruz, La Paz y una chef extranjera, y luego superó el temor de lanzarse al mercado con su producto. Su enfoque se centró en ingredientes saludables: linaza, harina de coco y edulcorantes naturales como Stevia y eritritol.

El resultado

Kenny pasó de pesar 94 a 74 kilos, con una meta de llegar hasta los 55 kilos. Su transformación no solo es física; se siente saludable y llena de energía, pero aún tiene camino por recorrer, sabe que sus padres, desde donde estén, estarían orgullosos de su compromiso con la salud. 

Los mensajes de gratitud de sus clientes y la oportunidad de ayudar a niños con sobrepeso son su mayor recompensa. En cada entrega agradece a Dios por permitir que sus sueños se hagan realidad y así continuar con mucha fuerza.