María Johaquina Romero: “Me gustan los riesgos y desafíos”
Es una joven profesional y emprendedora que decidió dar un giro radical a su vida cuando aprendió a preparar galletas y poner su propio emprendimiento.
María Johaquina Romero Jiménez, una joven de 30 años, soltera y contadora de profesión, nació en Camiri, provincia Cordillera, y desde niña ha vivido en Santa Cruz de la Sierra, donde ha encontrado el equilibrio perfecto entre sus raíces y su vida actual.
Cuenta que decidió dar un giro radical a su vida en marzo de este año. Después de seis años de graduada, sintió la necesidad de replantearse su futuro a nivel personal para hacer realidad sus sueños. Con una inclinación natural hacia los desafíos y el riesgo, decidió hacer un cambio más significativo como emprendedora en el campo de la repostería.
Pasión por las galletas
Desde siempre, María Johaquina había sentido una profunda pasión por los dulces, postres y galletas. En su mente, siempre había soñado con crear un producto de excelente calidad con ingredientes muy nuestros. Este sueño se materializó a principios de julio con el nacimiento de su pastelería de postres y galletas artesanales Dulce Magia Scz.
“Hacemos todo el proceso de la elaboración de galletas premium, hechas con productos de alta calidad y un ingrediente muy especial: el amor por todo lo que hacemos con gusto”, dice con mucho entusiasmo. Y así sus productos se han convertido en un deleite para todos, niños y grandes, con una variedad de sabores y opciones para los eventos sociales, como cumpleaños y reuniones empresariales.
¡Soy María de mil oficios!
Además de su fábrica de galletas artesanales también se desempeña como asesora inmobiliaria. Esta dualidad en sus emprendimientos le ayuda a explorar diferentes facetas de su personalidad, manteniéndose siempre activa y en constante aprendizaje.
Su capacidad para adaptarse y tomar riesgos ha sido clave en su éxito y satisfacción personal. Con Dulce Magia Scz, no solo ha logrado cumplir uno de sus sueños, también ha demostrado que, con pasión y sacrificio, es posible reinventarse y alcanzar nuevas metas, al final, recuerda que como emprendedora en nuestra sociedad, ¡todas somos agentes de cambio!
