El presidente de Colombia propuso al presidente de la Federación de Ganaderos Fedegan, José Félix Lafaurie, formar parte del equipo negociador del Gobierno en la mesa de negociaciones con el ELN

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18 de noviembre de 2022, 9:45 AM
18 de noviembre de 2022, 9:45 AM

El presidente de Colombia, Gustavo Petro,  propuso al presidente de la Federación de Ganaderos Fedegan, José Félix Lafaurie, formar parte del equipo negociador del Gobierno en la mesa de negociaciones con el ELN.

Primero fue el acuerdo para comprar hasta tres millones de hectáreas al sector ganadero para la anhelada reforma agraria. Y ahora, el presidente de izquierda, Gustavo Petro, sorprende con el pedido al líder ganadero José Félix Lafaurie de integrar la delegación del Gobierno en los diálogos de paz con la última guerrilla activa de Colombia, el ELN.

“Le voy a proponer, José Félix Lafaurie, que usted integre la comisión que hemos nombrado de parte del gobierno como negociadores con el Ejército de Liberación Nacional (ELN)”, declaró el presidente de Colombia.

“Por su mentalidad, por sus maneras de pensar, con su representación sobre un sector de la sociedad que indudablemente tiene algo y mucho que decir, su presencia será valiosa en los diálogos que se han iniciado con el ELN y ojalá sea la concreción de lo que hemos llamado la paz total”, aseguró Petro.

E dirigente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedegan)  aceptó ser parte del equipo negociador de paz.

“A quienes más nos ha golpeado la violencia es al sector ganadero y por eso me da frustración ver cómo hay ciertos actores que pretenden hacer del sector ganadero un sector victimario. Por el contrario, somos víctimas, y si el presidente me pide una colaboración en esta dirección lo voy a hacer con el compromiso que me obliga un sector como el nuestro”, sostuvo Lafaurie.

El gremio Fedegan se ha ubicado tradicionalmente a la derecha del espectro político e, incluso, Lafaurie es pareja de la senadora María Fernanda Cabal, prominente líder de la oposición.

La llamada “Paz Total”, insignia de este Gobierno, y que implica negociar con todos los grupos armados ilegales, pasa también, como reflejan las últimas decisiones de Petro, por los opositores más recalcitrantes.

Los fantasmas de la supuesta expropiación de tierras a ganaderos, y de la exclusión de los sectores más conservadores de esta nueva mesa de negociación quedan así disipados.

En los primeros cien días de su inédito gobierno de izquierda, Colombia acordó el cese de hostilidades con al menos diez grupos ilegales.

 "Eso es lo que llamamos 'paz total'", dijo Petro en referencia a la política con la que pretende negociar el desarme de los alzados en armas a cambio de beneficios legales.