El expresidente de Bolivia, Evo Morales, relató este domingo en Radio Kawsachum Coca detalles del supuesto atentado contra su vida que sufrió este domingo, 27 de octubre.
El exmandatario describió cómo, en medio del trayecto, fue interceptado por personas a bordo de dos vehículos que intentaron detener su marcha, supuestamente a tiros, recibiendo al menos 14 disparos en su contra.
"Pasábamos la novena (división del ejército) y nos sorprendieron dos camionetas, vehículos que llaman Ttundras. Al principio pensé que algún ebrio nos quería parar, pero luego sospeché que era raro", narró Morales, quien detalló que el chofer, de apodo Mapache, desvió el camino, pero uno de los vehículos logró cruzarse frente a ellos. "Nos dimos cuenta de que era un operativo".
Morales explicó que en medio de la confusión lograron maniobrar para escapar. "Nos agachamos y ahí empezaron los disparos. Escuché tres disparos al principio, y mientras seguíamos avanzando, disparaban más. Otro vehículo nos perseguía y casi nos alcanza ", afirmó.
El expresidente dijo que fue un momento de alta tensión, pero que lograron escapar con otro vehículo de la balacera: "Llegamos al segundo vehículo, pero el chofer venía herido, con un disparo en la cabeza y otro en el brazo. Afortunadamente, a mí no me alcanzó ninguno", manifestó.
Según Morales, en total, el vehículo en el que viajaba recibió 14 disparos.
Morales vinculó este ataque con amenazas previas que, asegura, ha recibido desde hace años. "Desde 2022 o 2023 veníamos denunciando. El general Zúñiga, en reuniones, decía: ‘Hay que bajar al Evo’. En términos militares, bajar es matar", dijo, insinuando que el operativo tenía como objetivo acabar con su vida.
El expresidente aseguró que pudo salvarse de milagro y reiteró que seguirá denunciando estos hechos: "Salvamos la vida apenas, pero aquí estamos para contar lo que pasó".