La directora distrital de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Lesly Lanza, reconoció que desde el lunes 30 de septiembre volvieron las filas a los surtidores en la ciudad de Santa Cruz, pero acusó a la “psicosis” del ciudadano que genera una aparente situación de escasez.

“No existe una escasez. Los volúmenes comercializados se están dando de manera normal, se han programado a principios de mes, hoy que es primero de octubre, se tiene una nueva programación para cubrir la demanda, pero al generarse una sobredemanda, ocasiona que el combustible se acabe de manera más rápida en la estación de servicio, dijo Lanza en una improvisada conferencia de prensa en un surtidor de la zona norte de la capital cruceña.

“Sin embargo -continuó- al generar una suerte de psicosis o susceptibilidad que actualmente atraviesa el ciudadano en Santa Cruz, se genera  especulación. Como consecuencia se forman filas en las estaciones de servicio”.

EL DEBER realizó un recorrido por algunos surtidores de la ciudad y se evidenció que en algunos no se comercializa gasolina Especial y diésel. Ciertos conductores manifestaron su descontento porque solo se podía encontrar las gasolinas Premium+ y la Ultra Premium 100, que tienen precios de Bs 5,71 y Bs 6,71 respectivamente.

“Esto es un gasolinazo”, dijo el conductor de un vehículo particular, que se quejó porque carga normalmente gasolina Especial, que tiene un precio de Bs 3,74 (subsidiado) y tiene que erogar más recursos para comprar la Premium+.

“La distribución se está dando de manera normal en la planta de YPFB (Palmasola). Es más, por la situación, estamos realizando doble trabajo en los despachos. Hoy día se ha tenido que abrir la planta a primeras horas de la mañana. Así también se está contando con volúmenes extras para poder realizar el abastecimiento”, agregó la ejecutiva distrital de la ANH.

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