En Bolivia, el tipo se cambio se mantiene fijo desde el 2 noviembre de 2011 por decisión del Gobierno nacional. Desde esa fecha, las administraciones en función de gobierno han negado sistemáticamente que se tenga en carpeta una devaluación de la moneda nacional frente a noticias y publicaciones en redes sociales que advierten sobre la situación de los indicadores macroeconómicos en los que se apoya el valor del boliviano.
El viernes pasado, el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas aseguró que "no ve ningún indicador que apunte a una devaluación”.
Además, de acuerdo al ente emisor, la economía boliviana alcanzó este 2022 el mayor nivel de remonetización entre los países de la región, informó el Banco Central de Bolivia (BCB), a tiempo de realizar una evaluación sobre las políticas que aplicó en esta gestión.
“El país alcanzó la mayor remonetización (desdolarización) en la región. De tal forma que hoy la moneda nacional tiene un uso pleno por la población, tanto como medio de pago como reserva de valor”, remarcó el ente emisor.
Según datos de la Asfi, el 99,2% de los créditos en el sistema financiero está en bolivianos al igual que el 85,5% de los depósitos, lo que demuestra “la confianza de la población” en la moneda local.
La tendencia por un mayor uso del boliviano en el sistema financiero comenzó en 2005, cuando el 7,5% de los préstamos estaba en moneda nacional y el 15,7% de los ahorros.
Otros resultados destacados por el BCB para este año son la estabilidad de las reservas Internacionales Netas, la buena salud del sistema financiero y el superávit en la Balanza de Pagos por segundo año consecutivo, lo que se explica por los récords históricos en exportaciones de productos tradicionales y no tradicionales, y en remesas familiares ($us 1.058 millones).
“En ese contexto, el BCB proyecta que el 2023 sea el año en el que se consolide la reactivación económica, una Bolivia con empleos y que reduce la pobreza, un país con una economía fortalecida y estable que mejora la calidad de vida de sus habitantes”, cita una nota de prensa del ente emisor.
El Banco Central de Bolivia destacó que, a pesar de la adversa situación mundial, las RIN se mantienen en niveles estables. El ente emisor prevé la inyección de $us 3.400 millones de saldos de créditos externos por desembolsar, "lo cual garantiza flujos continuos de divisas desde el exterior"