La dirigencia de los productores del Norte Integrado rompió el diálogo con el Gobierno luego de que la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) trasladó hasta un silo privado todos los camiones que presuntamente transportaban maíz transgénico.

“Se rompe el diálogo porque no hubo seriedad con el señor ese; es más, pedimos la renuncia de Franklin Flores, porque es un gerente incapaz, ese cargo le queda muy grande”, dijo Eliazer Arellano, dirigente de los productores agrícolas.

Por la mañana, el gerente general de Emapa, Franklin Flores, legisladores oficialistas y la dirigencia de los movilizados llegaron a un acuerdo de cinco puntos que contemplaba la suspensión de las medidas de presión.

Ese acuerdo, según Arellano, incluía una última toma de muestras de la carga de los camiones observados para un análisis más exhaustivo.

Sin embargo, tras la conclusión de la reunión, los dirigentes se encontraron con el hecho de que todos los camiones que se encontraban dentro y fuera de los predios de Emapa en esa región habían “desaparecido”.

“Franklin Flores, el gerente de Emapa, ha llevado los camiones hasta Cuatro Cañadas. Teniendo silo Emapa acá ¿cómo va a contratar otro silo privado? Esa es la logia masista”, sostuvo Arellano.

“Franklin Flores, gerente de Emapa, quedó en la reunión de ir al silo a hacer análisis del maíz que contiene para saber si era transgénico o no, pero resulta que salimos de la reunión y escapó, e hizo escapar sus camiones llenos de maíz transgénico”, relató Juan Pablo Espinoza, presidente de la filial Norte de la Asociación de productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), quien fue parte del diálogo inicial.

Arellano afirmó que los bloqueos se levantaron, pero advirtió que no dejarán pasar ni un camión cargado con maíz transgénico a los silos de Emapa en esa región.

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