“Ya las fuerzas humanas están cansadas y no dan para seguir luchando. Necesitamos herramientas, mochilas, agua y víveres para alimentar a la gente voluntaria que está trabajando más de 75 días”, clamaba por ayuda el subalcalde de Tumupasa (San Buenaventura), Gary Terrazas, al reflejar la crítica situación que se vive por los incendios forestales que no dan tregua en el norte paceño y el departamento beniano.
Este sábado nuevamente se vivieron momentos de desesperación. En la comunidad de Retiro (San Ignacio de Moxos) el fuego alcanzó viviendas del Territorio Indígena Multiétnico (TIM), que quedaron en cenizas en cuestión de minutos; lo mismo ocurrió en la comunidad El Cebú (Rurrenabaque), donde ardió una casa.
“Durante la mañana de este sábado, el fuego alcanzó viviendas de la comunidad de Retiro. La dirigencia de la Subcentral TIM y las autoridades del Gobierno Autónomo demandan la atención del Gobierno nacional y la Gobernación”, informó el Centro de Estudios, Jurídicos e Investigación (Cejis) en un comunicado divulgado a través de redes sociales.
En la zona de El Cebú el fuego también cercó la comunidad y, pese a los esfuerzos de los pobladores por proteger sus casas, una de ellas fue alcanzada por las llamas. En medio de la desesperación, una mujer pedía a gritos salir de las casas para ponerse a buen recaudo.
El subalcalde de Tumupasa informó que el fuego avanza en la serranía, donde están las nacientes de agua y está arrasando con la biodiversidad del Parque Nacional Madidi. Señaló que han recibido ayuda, pero es insuficiente para la magnitud de los incendios forestales, que se reactivan con los fuertes vientos. Hay cansancio y desesperación porque las brigadas llevan días resistiendo el avance del fuego, abriendo brechas cortafuego.
En Yucumo (San Borja) también los embarga el cansancio y un profundo sentimiento de impotencia al ver como las llamas devoran los bosques y gigantescas nubes de humo sobresalen en distintos sectores.
Allí, los comunarios recibieron el apoyo de 20 efectivos militares y de voluntarios, pero el humo y el calor sofocante debilitan las fuerzas. Ayer se registró una baja. Un voluntario sufrió una descompensación tras enfrentar el fuego y tuvo que ser evacuado para que reciba asistencia médica.
En su informe el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, señaló que los grupos voluntarios y el Gobierno Municipal de San Buenaventura han logrado controlar en cierta manera el fuego en esa zona, porque no ya corre peligro el ingenio azucarero y la comunidad de Altamarani ya ha sido protegida, aunque ardió una vivienda. Calvimontes informó que ayer las operaciones áreas se concentraron en la zona de la comunidad Tres Hermanos.
El viceministro de Defensa Civil informó también que el equipo técnico-científico reportó la posibilidad de realizar la estimulación de nubes en Santa Cruz. “Hay condiciones para efectuar esta técnica en el departamento cruceño el lunes, a partir de las 10:00. Podrían beneficiarse de esta lluvia artificial los municipios de: Pailón, Roboré, Concepción y San Matías”, adelantó la autoridad.
El relator especial de las Naciones Unidas sobre Derechos Humanos y Medio Ambiente, David R. Boyd, expresó su preocupación por Bolivia. Esta vez por los incendios que están azotando a varias regiones del país.
El relator David R. Boyd afirma que los incendios están destruyendo los bosques y los territorios tradicionales de los pueblos indígenas. A principios de mes también se pronunció sobre la minería en áreas protegidas