Las unidades de la Policía que, el pasado 26 de junio, lograron ingresar al Palacio Quemado, esperaban en el hall del histórico edificio para enfrentar a los militares, que ya habían avasallado la puerta principal; incluso alistaron un nido de ametralladora en unos escalones que dan directo al ingreso, donde estaba Juan José Zúñiga, relató este miércoles el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.

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“Aquí hay unas gradas y una zona de descanso, en esa zona había una ametralladora con un trípode apuntando directamente al ingreso, si en ese momento el Presidente (Luis Arce), mi persona, o el comandante general de la Policía hubiesen tenido la osadía de arrestar o aprehender en flagrancia a los tres generales, probablemente hubiese existido un cruce de fuego entre el personal de la Policía, personal de la Casa Militar que se encontraba en su interior y los militares que estaban ingresando poco a poco”, relató el ministro en conferencia de prensa.

El 26 de junio, después de las 14:00, unos 14 carros de asalto ingresaron a la plaza Murillo acompañados de cientos de conscriptos armados de la Policía Militar, tomaron la histórica plaza y de uno de los vehículos descendió el excomandante de Ejército, Juan José Zúñiga quien anunció la toma del Gobierno. Su acción duró unas cuatro horas y luego salió del lugar.

Al ingreso de Palacio Quemado, y luego de derribar una histórica puerta de ingreso Arce y Zúñiga se confrontaron rodeados de colaboradores. Según el relato del ministro, si los militares pasaban de ese sector y accedían al centenario hall de palacio se habría producido la balacera entre ambos bandos. “Probablemente habría sido con peores consecuencias que en 2003”, graficó la autoridad.

Del Castillo hizo una larga explicación de los planes de Zúñiga y las acciones que realizaron ese mismo día en proximidades de plaza Murillo. De acuerdo con el nuevo organigrama presentado, ya suman 70 las personas involucradas en los sucesos del 26 de junio en la plaza Murillo. Hasta el momento, el gobierno capturó a 23 personas que fueron cauteladas; mientras que otras declararon en calidad de testigos.

De igual forma, el ministro también relató que el general Zúñiga incluso ya tenía un discurso para pronunciar luego de la toma del poder, en el que se puede observar que él sería el presidente e iba a convocar a nuevas elecciones. 

“Esto no será únicamente el trabajo de este gobierno de emergencia, sino el trabajo conjunto con la sociedad civil para entregarle una visión de país y los lineamientos de políticas de Estado a los siguientes gobernantes”, señala una parte del texto expuesto por el ministro.

De las declaraciones de los testigos y aprehendidos el Gobierno afirma que el plan fue urdido con anterioridad, por lo que empezaron a revisar las publicaciones de Zúñiga en su cuenta Facebook y la forma en cómo asumía el comando de Ejército.

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