El huracán Helene ha dejado un rastro de muerte y destrucción a su paso por el sureste de Estados Unidos y ahora parece colarse en la campaña electoral.  

El viento, las lluvias torrenciales y las inundaciones han anegado grandes áreas en seis Estados diferentes: Florida, Georgia, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Tennessee y Virginia. Los socorristas seguían el lunes por la tarde buscando supervivientes y llevando alimentos a los residentes afectados por las inundaciones, los cortes de energía y las carreteras bloqueadas. 

“Esta es una tragedia sin precedentes que requiere una respuesta sin precedentes”, ha expresado el gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper. 

Con la cifra de muertos en aumento, al menos 118,  y más de 600 desaparecidos, el candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, viajó al estado de Georgia, uno de los estados más afectados por la tormenta y distrito clave en las elecciones de noviembre.  

"El gobierno federal no está respondiendo" a la emergencia, dijo Trump a periodistas en la localidad de Valdosta, adonde prometió llevar "mucho material de ayuda, incluido combustible, equipamiento, agua y otras cosas" a los necesitados. 

"La vicepresidenta está en algún lugar, haciendo campaña, buscando dinero", dijo el magnate contra su rival, Kamala Harris. Harris, que canceló eventos de campaña para informarse sobre la respuesta federal en Washington, también visitará las zonas afectadas después de la primera ola de operaciones de emergencia.

El presidente Joe Biden informó que viajará el miércoles al estado de Carolina del Norte, también golpeado por las inundaciones y electoralmente estratégico. Biden dijo que no visitaría antes la región para no causar "disrupciones" en las tareas de emergencia. 

Su gobierno aprobó ayuda federal para los estados afectados y prometió que la asistencia durará "todo el tiempo que sea necesario". "Seguiremos enviando recursos, incluyendo alimentos, agua, comunicaciones y equipos de salvamento", dijo el presidente.   

Biden atribuyó este lunes la devastación del huracán Helene al cambio climático. "Absolutamente, positivamente, inequívocamente, sí, sí, sí", dijo Biden a periodistas que le preguntaron si la destrucción se debía a la crisis climática.

Los científicos sostienen que el cambio climático probablemente desempeña un papel en la rápida intensificación de los huracanes, porque hay más energía en los océanos más cálidos para que estos se alimenten.

Helene tocó tierra el jueves en el noroeste de Florida como un huracán de categoría 4con vientos sostenidos de hasta 225 kilómetros por hora. Su entrada en el continente se produjo por una zona relativamente poco poblada, el llamado Big Bend, y en la que se habían realizado evacuaciones masivas por el recuerdo del huracán Ian, de 2022.

La oficina del sheriff del condado de Pinellas, en Florida, publicó una lista de los muertos encontrados allí hasta ahora, casi todos fallecidos en sus propias casas. La mayoría parecía haberse ahogado, dijo, y otros estaban enterrados bajo los escombros.

 

(Con AFP)