Donald Trump, notorio escéptico sobre la realidad del climático de origen humano, no ha dejado lugar a dudas sobre su deseo de sacar a Estados Unidos del Acuerdo de París y destruir las políticas medioambientales y climáticas de Joe Biden. 

Este desmantelamiento anunciado implicará inevitablemente a la EPA, la poderosa Agencia de Protección Medioambiental estadounidense. Prueba de que este asunto es una de las prioridades del presidente electo: el lunes 11 de noviembre, Donald Trump nombró al hombre que dirigirá la EPA.

Lee Zeldin es un abogado neoyorquino de 44 años. Pasó cuatro legislaturas como miembro electo del Partido Republicano en la Cámara de Representantes.

 Durante este tiempo, Lee Zeldin defendió un humedal en su circunscripción de Long Island, para lo que obtuvo financiación de la EPA. En el Congreso, también se unió al Conservative Climate Caucus, un grupo de representantes electos republicanos que reconocen el origen humano del cambio climático. 

Esto no le ha impedido votar contra la Ley de Reducción de la Inflación, el proyecto de ley sobre el clima de Joe Biden, o contra un mejor control de las emisiones de metano, por citar sólo algunos ejemplos.

Lee Zeldin apoya la expansión de los combustibles fósiles

Votó a favor de cuestiones medioambientales sólo el 14% de las veces, según un recuento de la Liga de Votantes por la Conservación. Eso es mucho menos que el número de candidatos demócratas, pero mucho más que sus otros colegas republicanos en el Congreso estadounidense.

Durante su infructuosa campaña para gobernador de Nueva York en 2022, Lee Zeldin apoyó la expansión de los combustibles fósiles y la construcción de nuevos oleoductos. Pero su principal cualificación para ser nombrado jefe de la EPA es que es uno de los partidarios más leales de Donald Trump.

La misión de Lee Zeldin: la desregulación

La misión de Lee Zeldin al frente de la Agencia de Protección Medioambiental de EEUU viene marcada por Donald Trump y se resume en una palabra: desregulación. El Presidente electo considera que la legislación favorable al clima es un freno para el crecimiento económico estadounidense. Por ello, se espera que Lee Zeldin deshaga el mayor número posible de normas vigentes que protegen la naturaleza y el clima. 

El objetivo es dar una nueva vida a los combustibles fósiles, ignorando la emergencia climática. El propio Lee Zeldin anunció en la cadena X que iba a “restaurar el dominio energético de Estados Unidos”.

“Vamos a restaurar el predominio energético de Estados Unidos”

“En los primeros 100 días, vamos a eliminar las regulaciones que causan dificultades a las empresas y las obligan a trasladarse al extranjero”, anunció el lunes en el canal Fox News, poco después del anuncio de su nombramiento. “El ala izquierda de este país ha utilizado su poder para poner en marcha normativas que acaban empujando a las empresas en la dirección equivocada”. 

Como demuestran estas declaraciones de Lee Zeldin sobre “el ala izquierda de Estados Unidos”, para los trumpistas la lucha contra el cambio climático es una cuestión de ideología política.

Un enfoque sanitario más que medioambiental

Y, sin embargo, al igual que Donald Trump, el nuevo director de la Agencia de Protección del Medio Ambiente ha prometido aire y agua limpios para todos los estadounidenses. Se trata de una cuestión delicada tras los numerosos escándalos de contaminación del aire y el agua que han estallado en Estados Unidos en las últimas décadas, y que han afectado sobre todo a los estadounidenses desfavorecidos, muchos de los cuales votaron a Donald Trump la semana pasada.

El nombramiento de Lee Zeldin aún debe ser aprobado por el Senado, donde los republicanos han ganado 53 de los 100 escaños, lo que les da una mayoría bastante cómoda.