La cercanía de Todos Santos y Día de Difuntos genera movimiento en los cementerios. En las puertas de los camposantos aguardan pintores y albañiles en busca de trabajo, pues aprovechan que los familiares hacen arreglos a las tumbas de sus seres queridos.
Los que se dedican al pintado y arreglos de nichos señalan que la crisis golpea y que ya no se genera ganancias como antes, pero al menos es una oportunidad de trabajo seguro. Sus tarifas varían de acuerdo a lo que el cliente solicita, pues va desde Bs 30 un pintado solo del frontis del nicho hasta más de Bs 1.000 todo el mausoleo. Y aumenta de acuerdo al tamaño y las condiciones en que se encuentran las tumbas.
¿Va hacer pintar? Es la pregunta que hace de inmediato Yeli Camargo (35) a toda persona que llega al cementerio de la Villa Primero de Mayo, donde pintaba este martes con ayuda de su hija mayor y un sobrino.
Ella tiene cinco hijos, la mayor va a cumplir 17 y el menor tiene seis, y cada año, desde el 15 de octubre hasta el 1 de noviembre, se aboca al trabajo en los cementerios, porque en otras épocas se dedica a hacer limpieza. Se marca tiempos para avanzar y entregar lo antes posible para poder tener algo más de ganancia. En promedio saca diariamente entre Bs 100 y 140 que es para el sustento de su hogar, porque también paga alquiler.
Ella vive en el barrio Arroyito, pero toma una línea de micro para llegar hasta el cementerio de la Villa. “Soy la única mujer en este cementerio donde acudo desde hace unos ocho años, pero antes trabajaba en el Cementerio General. Hago este oficio desde hace unos 15 años, porque empezamos con mis hermanos que son pintores”, cuenta.
Señala que saca algunas ventajas por la experiencia. “Hay varias personas que ya me conocen y me dan trabajo, porque confían en lo que hago”, dice al comentar que no es tan fácil dejar bien arreglada una tumba, porque se tiene que raspar con espátula y lijar antes de empezar a colocar la pintura. También deben hacer con mucha dedicación el pintado de las letras.
En el cementerio Sagrado Corazón de Jesús, conocido como La Cuchilla, los albañiles se agrupan en la entrada principal, esperando la llegada de quienes acuden a arreglar las tumbas de sus seres queridos. “Depende de las condiciones del nicho. Si está en buen estado, cobramos Bs 30 por cada frente, incluyendo las letras”, explica uno de los albañiles a Marina Sumoya, quien se detiene a escuchar las distintas ofertas de los constructores.
Daniel Gamboa, maestro albañil y padre de dos niños, admite que no hay tanto trabajo como otros años, porque la pintura y materiales han subido de precio y la gente se resiste a pagar. Sin embargo, tras un poco de regateo, logran ponerse de acuerdo.
Por ejemplo, un colega suyo agarró un contrato para pintar un mausoleo de seis nichos por Bs 600, lo que antes se cobraba entre Bs 700 y 800. “Es complicado, la gente no quiere pagar”, comenta, señalando que antes compraba un balde de 10 litros de pintura por Bs 120, pero ahora el precio ha subido a Bs 150. Hay otras de mejor calidad a Bs 280, pero también eleva el costo de los arreglos, ya en muchos casos son los albañiles los que deben proveer los materiales.
Otros albañiles son contratados solo por la mano de obra. Gamboa, por ejemplo, aceptó un trabajo por Bs 230 para un mausoleo de seis nichos.
Señala que el precio de la pintura para las rejillas también se ha encarecido, porque antes costaba Bs 10 y ahora vale el doble. “Si se trata de refacción y pintado, el costo es de Bs 1.500, pero la gente quiere pagar Bs 800 e incluso Bs 600”, comenta al señalar que se dedica a este oficio desde que era adolescente y espera esta época para reunir algo de recursos.
Hay quienes se dedican exclusivamente al pintado de letras, con costos que oscilan entre Bs 30 y 50, dependiendo de la altura del nicho. José ofrece sus servicios de pintor en un letrero que colocó en uno de los pasillos del cementerio. “La gente recién ha comenzado a venir para sus arreglos, pero está a tiempo porque queda poco más de una semana para hacer trabajos”, comenta. Coincide en que el costo de la pintura ha subido, lo que ha obligado a hacer un ajuste en los precios de los trabajos, aunque la gente también pide rebajas.
Además de los albañiles, hay adolescentes y jóvenes que ayudan con la limpieza de lápidas y mausoleos, y cobran desde Bs 10. También ayudan con el traslado escombros y de basura en carretillas.
Para reducir gastos, muchos familiares optan por hacer los arreglos por cuenta propia. Este es el caso de Marcos Benavidez, quien llegó al cementerio con su balde de pintura, brochas y lijas. “Es mucho más barato. Con tanta crisis, es mejor ajustarse el cinturón”, comenta, explicando que los Bs 150 que invierte en pintura son suficientes para pintar los nichos completos donde descansan su papá y su hermano.
Algunas personas acuden con anticipación. Ángela, una mujer de 63 años, acudió este martes a ver la tumba de su hijo que falleció en 2009, cuando estaba por cumplir 22 años. “Es un dolor que uno siente toda la vida. Sabía que en cualquier momento nos iba a dejar, porque tenía soplo en el corazón”, indica.
“Me da pena algunas tumbas que están descuidadas, hay personas que no se acuerdan de sus difuntos”, lamenta.
El Gobierno Municipal de Santa Cruz de la Sierra recuerda a la población que está prohibido el expendio y consumo de bebidas alcohólicas en los cementerios. Tampoco se permitirán musicones.
La Alcaldía continúa con las labores de limpieza y fumigación en los 26 camposantos municipales. Las solicitudes para trabajos de refacción, pintado y colocación de lápidas estarán habilitadas solo hasta el 30 de octubre, toda vez que el 31 no se permitirá el ingreso de personas porque la comuna tiene previsto hacer una limpieza general para las masivas visitas. Los cementerios estarán abiertos de 8:00 a 22:00 el 1 y 2 de noviembre.
“A partir de esta semana se van a intensificar los trabajos de limpieza para dejar los cementerios en óptimas condiciones para las visitas”, informó este lunes el director municipal de Cementerios, Sebastián Gutiérrez.
Brigadas de la Alcaldía también recorren con equipos para hacer fumigaciones y eliminar mosquitos y otros vectores.
Gutiérrez insistió en que está prohibido ingresar bebidas alcohólicas, hacer fogatas y usar pirotecnia dentro de los cementerios. “Tampoco está permitido el ingreso de equipos de sonido, conjuntos musicales y todo tipo de música”, complementó Gutiérrez.
Asimismo, instó a los visitantes a no dejar basura ni realizar actos que perturben la tranquilidad. “Queremos garantizar un ambiente de tranquilidad, donde la gente pueda visitar sus seres queridos sin distracciones”, afirmó Gutiérrez.