La fuga de película de los sicarios brasileños del PCC del Pc-7, de Palmasola, el recinto más seguro, pone al límite de un nuevo escándalo.
Según últimos informes de inteligencia conocidos por EL DEBER, el escape de Luis Andrés Xavier Da Rocha y Benjamín Michel Emerson Da Silva, procesados desde marzo por asesinato, fue bien planificado.
Tras la fuga registrada la madrugada del martes, una movilización rápida de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), se logró la recaptura de los ciudadanos brasileños en medio de una balacera de película, pasado el mediodía de ayer, en un inmueble por la calle Venezuela, zona de la Universidad Gabriel René Moreno.
Las investigaciones se profundizaron ante las interrogantes sobre cómo se pudo ejecutar la evasión del Pc-7, siendo el recinto más seguro del país, incluso por encima de Chonchocoro de La Paz.
Datos analizados por investigadores de inteligencia, revelan que la fuga contó con la participación de policías encargados de la seguridad, por lo que todos están siendo convocados a declara a la Fiscalía.
El informe se complementa con el descubrimiento de evidencias sobre la participación en la fuga de reos antiguos considerados peligrosos, que purgan penas de hasta 30 años de presidio.
Asimismo se conoció que existe la posibilidad de que corrió una jugosa suma de dinero para facilitar la fuga, pero que el caso quedará esclarecido y que es cuestión de horas.
Con armas calibre 6.2
El comandante de la Policía Erick Holguín y el director de la Felcc, Julio César Cossío, informaron que en tiempo récord se recapturó a los brasileños Luis Andrés Xavier Da Rocha y Benjamín Michel Emerson Da Silva, acusados de asesinar en Minero a Wilson Ledezma.
Los extranjeros fueron ubicados pasado el mediodía de ayer en un inmueble por la calle Venezuela, cerca de la Gabriel René Moreno. La ubicación de los fugitivos se logró gracias a un rastreo cibernético, comparaciones de datos, además de imágenes de cámaras de seguridad.
Los jefes policiales afirmaron que durante la intervención al lugar se pudo verificar que los fugitivos al verse acorralados, salieron disparando sus armas de fuego. Estaban en poder de armas de industria estadounidense calibre 6.2. Esta acción obligó a los agentes a responder usando sus armas de reglamento.
El resultado fue un policía herido en el rostro con una esquirla y uno de los brasileños impactado en un pie. Se capturó a la concubina de uno de los sicarios, al chofer que ayudó a la fuga del penal, además de otros brasileños que se encontraban en el inmueble.
Los recapturados serán imputados por evasión y la Policía ya pidió su traslado a la cárcel de Chonchocoro de La Paz, teniendo en cuenta el alto grado de peligrosidad de los sujetos.