La emergencia sanitaria que vive el país motiva a que muchas personas busquen la forma de protegerse para no contraer el coronavirus y uno de los productos que más se busca con este fin es el barbijo.
Este insumo sanitario puede ser hecho con diferentes materiales, pero destaca el denominado N95, una mascarilla especial que brinda protección respiratoria contra microorganismos que se transmiten por aerosoles, como tuberculosis, influenza y el Covid-19.
En tal sentido Roberto Tórrez, director de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (Sedes), se dirigió a las farmacias para que eviten vender este producto a personas particulares.
Tórrez señaló a la red Unitel que no se debería quitar la oportunidad de usar este barbijo a un médico o una enfermera que son quienes están en la primera línea de lucha contra el virus.
Este modelo de mascarilla, el N95, puede ser usado hasta por cinco días, mientras que las otras más comunes, se tienen que desechar a las seis horas de uso.
La reflexión parte de la idea de que las personas particulares no deben salir de casa y, por lo tanto, el uso de barbijos especiales en el interior de la vivienda es relativo y solo se utilizaría si, en caso muy extremo, se debe abandonar la vivienda para salir a lugares concurridos como un mercado o los bancos. Si este es el caso, un barbijo común también puede ser usado.
Hay un déficit de 1.100 unidades de terapia intensiva. Se invierte 273 dólares anualmente por cada persona, mientras que otros países cercanos disponen al menos de mil. Hay cuatro aceleradores lineales, se requieren por lo menos 22