Desde este lunes, los trabajadores de salud en Santa Cruz acatan un paro de 120 horas, en demanda del pago de retroactivos e incremento salarial para más de 400 funcionarios. La medida, que coincide con el inicio del mes de septiembre, afecta la atención en centros de salud y hospitales de segundo y tercer nivel en todo el departamento.
El secretario ejecutivo de los Trabajadores de Salud, Robert Hurtado, explicó que el retroactivo debió ser pagado el 31 de mayo, al igual que al resto de los trabajadores del país. Sin embargo, hasta la fecha, la Asamblea Legislativa Departamental (ALD) cruceña no ha aprobado la medida, a pesar de haber sido discutida en comisión.
Durante esta semana, solo se atenderán casos de emergencia y laboratorio, mientras que las consultas externas quedan suspendidas.
En el Hospital San Juan de Dios, uno de los principales del departamento, se colocó un letrero en la puerta advirtiendo a los pacientes sobre el paro movilizado que durará hasta el viernes.
Además de la exigencia del retroactivo, los trabajadores rechazan la reducción presupuestaria y exigen la ampliación de recursos humanos, así como la aprobación de una escala salarial justa. Hurtado señaló que, a pesar de los anteriores paros, la situación sigue sin resolverse, lo que ha llevado a los trabajadores a endurecer sus medidas.
El sector salud anunció, además, una protesta frente a la Gobernación para presionar por una solución inmediata a sus demandas. La movilización se suma a los reclamos de la semana pasada, cuando realizaron un paro de tres días.
Los reportes del Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA) y de la Autoridad de Bosque y Tierra (ABT) confirmaron que a pesar de las prohibiciones, siguen las razones de alerta. Guarayos y la Chiquitania literalmente están en llamas