Los trabajadores del Banco de Sangre iniciaron este martes, 16 de julio, un paro de 48 horas en protesta por los despidos masivos de personal que consideran injustificados. La medida afectará la donación de sangre y la atención al público, aunque se seguirá abasteciendo la emergencia.
Daniela Chávez, dirigente de los trabajadores del Banco de Sangre, explicó que el paro se debe a la falta de respuesta por parte del secretario de Salud de la Gobernación, Marcelo Kramer, a sus demandas de reintegro de los despedidos.
Según los trabajadores, hay una lista de 33 personas que están siendo despedidas de forma gradual. Afirman que ya se han concretado más de 20 despidos y que la Gobernación está mintiendo al decir que solo son cinco.
"Lo único que quiero decirle aquí al secretario de Salud es que basta de mentiras. Que lo único que queremos nosotros es que él venga al Banco de Sangre y nos dé una solución porque la perjudicada es la población", señaló Chávez.
La dirigente también lamentó que el paro afectará la donación de sangre, ya que se suspenden las donaciones y la atención al donante. "Se estima que se dejarán de recibir entre 180 y 200 donantes por día", dijo. Eso sí, aclaró que no se dejará de abastecer al servicio de emergencia.
Por su lado, la Federación Departamental de Trabajadores de Salud de Santa Cruz, que ya expresó su apoyo a los trabajadores del Banco de Sangre, se reúne este martes a las 10:00 en un ampliado departamental para definir la posibilidad de ingresar a un paro de 24 horas este miércoles.
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