A pesar de que en el país hay una estabilidad de precios, según el INE, el manejo adecuado de los ingresos y gastos es fundamental para evitar sorpresas

23 de agosto de 2022, 7:38 AM
23 de agosto de 2022, 7:38 AM


La presión de altos costos en los productos que importa Bolivia y el incremento de algunos alimentos, artículos y servicios, hace necesario analizar las finanzas personales desde una perspectiva de corto plazo, que permita mejorar la capacidad de pago, como también desde una visión de largo plazo que cuide el patrimonio de forma integral. Bolivia todavía registra una inflación manejable del 1,58%, según el INE, pero se evidencia un registro de mayores precios en alimentos y artículos de aseo. 

Para planear las finanzas personales, de acuerdo con Víctor Hugo Figueroa, expresidente del Colegio de Economistas de Bolivia, es necesario terminar con los viejos hábitos de indisciplina en lo que se refiere a los gastos habituales y adquirir una conducta metódica que permita maximizar las compras y, en el mejor de los casos, gastar menos. Figueroa considera que llevar un control escrito de los ingresos y egresos es una de las claves para hacer frente a la variación de los precios, lo que permite un mejor registro de los gastos diarios, semanales y mensuales.

Adolfo Ruiz, responsable de Educación Financiera en BX+, en entrevista con El Economista, precisó que para planear las finanzas se requiere quitar ideas equivocadas como: mi presupuesto y gastos los llevo en la mente, o si tengo mayores ingresos mis finanzas son mejores.
Otro enfoque equivocado es pensar que los instrumentos financieros son caros y complicados y que por tener algunas deudas atrasadas en el sistema financiero voy a tener problemas en el futuro, precisó Ruiz.

Según Figueroa, no se debe esperar que los precios suban o que la frecuencia en el pago de los salarios se atrase para optar por una conducta ordenada y realista de la capacidad de pago que uno tiene. “Ser consciente de la realidad financiera que tenemos y no aparentar una errada imagen del poder adquisitivo que tenemos, es lo primero que debemos hacer”, indicó Figueroa. 

Priorizar las necesidades

En este aspecto, se debe tener bien claro el siguiente paso que tiene que ver con los objetivos planteados y que de alguna manera van a permitir controlar los gastos para conseguir un horizonte de ahorro.

Mercado precisó que, al momento de establecer metas, estas deben estar incluidas en el presupuesto de gastos fijos que determinan cuáles son los gastos que sí o sí se deben realizar. Una vez establecido aquello ya se puede pensar en un margen de ahorro.

Ruiz hizo notar que, en la actualidad, para lograr mejores resultados, se puede recurrir a las herramientas que ofrece la banca o a cursos e información que hay en sitios especializados para potenciar la cultura financiera.

Inversiones

Ya pensando en un mediano y largo plazo, Figueroa considera que para impulsar finanzas personales no alcanza con tener ingresos fijos, sino que hace falta dar un salto cualitativo que tiene que ver con arriesgarse a invertir.

“Es cierto que a la hora de invertir la duda y el temor de perder los ahorros es una barrera que muchas personas no pueden superar. Pero de eso se trata cuando uno quiere tener el control de su dinero a mediano y largo plazo. Urge tener audacia, estar bien informado y el tino de buscar, en primera instancia, lo que uno puede alcanzar y no al revés”, precisó Figueroa. 

Ruiz subrayó que es importante permitir que el dinero trabaje para uno y para ello es fundamental seleccionar un instrumento acorde al horizonte de inversión y el perfil de inversión. Además de diversificar el portafolio y utilizar el crédito a su favor para adquirir bienes duraderos que de alguna manera permitan mejorar el patrimonio. Para Mercado, llegar hasta la instancia de invertir y no solo mirar el ingreso fijo, demuestra que salir de la zona de confort es cuestión de actitud y audacia.