El presidente Luis Arce afirmó este jueves que no permitirá que los “temas políticos” afecten o dañen la economía del país, mientras continúa la polémica por la censura del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.
“No vamos a permitir, no vamos a permitir, que los temas políticos dañen la economía de las y los bolivianos, vamos a continuar trabajando por darle esa certeza a la economía boliviana y, por lo tanto, a la población (porque) aquí hay un gobierno que trabaja por la economía boliviana y aquí están los resultados que hoy presentamos de manera clara a Bolivia y al mundo entero”, dijo Arce durante la firma de convenios para el desarrollo de la industrialización del litio en el Salar de Pastos Grandes, de Potosí.
Además, en el mismo sentido, señaló en sus redes sociales que su administración es un “gobierno de la industrialización del litio” y que, “pese a los ataques internos y externos, el trabajo no se detiene, la industrialización no se detiene”.
Entretanto, continúa la presión de los opositores y de los “evistas” para que Arce destituya a su cuestionado ministerio después de que, el pasado martes, fue censurado en la Asamblea Legislativa por el tráfico de autos robados en Chile que terminan en Bolivia.
El expresidente y líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, afirmó que la censura es “vinculante, obligatoria y de inexcusable cumplimiento”.
El expresidente y líder de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, señaló que Arce “debe cumplir el mandato constitucional de excluir (a su ministro censurado) del Gabinete sin demoras”.
El gobernador de Santa Cruz y líder de Creemos, Luis Fernando Camacho, indicó que, en lo moral, “esta censura también es para Luis Arce” y que el Presidente “debe demostrarle al país que no es cómplice de Del Castillo”.
El ministro participó de la reunión de gabinete del miércoles cuando Arce no estaba enterado "formalmente" de la censura. Legisladores del ala evista y la oposición le piden al Gobierno "que no pisotee la Constitución"