Incertidumbre es lo que reflejan los conductores del transporte pesado, luego de verse obligados a esperar por más de 24 horas en las afueras de los surtidores de la capital cruceña en busca de conseguir abastecerse de diésel. Pese a las largas horas de espera, tampoco logran su cometido, por lo que aseguran que están forzados a permanecer en vigilia.

En la estación de servicios del cuarto anillo y avenida San Aurelio, en la capital cruceña, se observa una larga fila de buses y camiones de alto tonelaje. Allí, los conductores están al acecho con su mirada esperando que les avisen que puedan avanzar para cargar combustible.

Continúan las largas filas de vehículos en los surtidores/Foto: Juan Delgadillo

​Foto: Juan Carlos Torrejón

Los conductores del transporte pesado y del servicio público interdepartamental se ven forzados a permanecer por más de 24 horas en la fila en los surtidores, ya que no pueden emprender sus viajes, porque la situación en las provincias y otros departamentos es igual o peor que en la capital cruceña, según relatan.

Guery Cossío. conductor qué realiza su trabajo entre Santa Cruz y la Chiquitania, aseguró que él recorrió al menos 10 surtidores, pero el panorama en todos era el mismo, por lo que decidió quedarse en el de la Avenida San Aurelio y 4to anillo. A la fila de este surtidor llegó el martes, 23 de julio, a primeras horas de la mañana, pero un día después continuaba en el mismo lugar sin siquiera avanzar unos metros.

"Estamos en la incertidumbre, no sabemos cuándo podremos cargar diésel. A las 7:00 de ayer (martes) las filas en los surtidores superaba los dos kilómetros, pero hoy (miércoles) está un poco vacío, porque no hay combustible. Según para jueves dicen que se va normalizar el abastecimiento, así que no sabemos cuándo nos vamos a mover de aquí", indicó Cossío en entrevista con EL DEBER.

Continúan las largas filas de vehículos en los surtidores/Foto: Juan Delgadillo

​Foto: Juan Carlos Torrejón

Explicó que sus viajes son fuera de la ciudad de Santa Cruz y para cumplir con sus rutas, debe obligatoriamente cargar combustible en la capital, ya que en las provincias la espera por diésel es peor, donde se tardan entre tres y cuatro días para conseguir el combustible.

"Estamos estorbando haciendo fila para cargar diésel, las movilidades chicas se molestan, pero ¿dónde más vamos a ir a hacer fila?, no hay espacio. Diez surtidores hemos recorrido ayer", señaló.

Constancio Calle, conductor de un bus interdepartamental, aseguró que esta situación no solo se vive en Santa Cruz, sino también en otros departamentos.

"Estamos aquí desde ayer, son más de 24 horas de espera y lo peor es que, no se sabe si llegará a o no (combustible)", dijo.

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