El mes pasado, el banco central de EEUU pronosticó este resultado y dijo que las tasas más altas “traerían algo de dolor a los hogares y las empresas”. Expertos prevén que aumente el desempleo

22 de septiembre de 2022, 9:26 AM
22 de septiembre de 2022, 9:26 AM


La Reserva Federal de EEUU (FED) subió ayer las tasas de interés, por tercera vez consecutiva con el objetivo de frenar la inflación en un escenario de alta demanda y poca oferta. Así, se van cumpliendo los pronósticos del Banco Mundial, en el sentido de que el alza simultánea de tasas de interés por parte de los bancos centrales en el mundo, refuerza el riesgo de una recesión generalizada en 2023.

La medida adoptada por la Fed, entidad equivalente en el país al Banco Central de Bolivia, provocó nerviosismo en los sistemas financieros y bursátiles desde el lunes. El martes, el oro, un refugio seguro de inversionistas, vio desplomar su precio a mínimos de hace dos años.

Las tasas de referencia de los bancos centrales aumentaron en promedio un 2% con relación a 2021, pero podría ser necesario un incremento equivalente para llevar la inflación hacia los objetivos que se plantean, según un estudio del Banco Mundial, con sede en Washington.

La determinación también tendrá un impacto en el aumento del desempleo en EEUU, en momentos en que los salarios registraron un crecimiento. El salario mínimo federal está en $us 7,09 la hora, pero en la presente gestión escaló incluso hasta los $us 16 en al menos 21 estados.

Factores que influyen

EEUU es el país más rico, poderoso e influyente del mundo. Sin embargo, no está al margen de los efectos que provoca el conflicto Rusia-Ucrania que frenó el acceso a energía y alimentos.
El problema principal radica en que la demanda en la economía sigue siendo demasiado alta en medio de una escasez de oferta global. Gracias al gasto restringido durante los confinamientos por Covid y los planes de estímulo federal, los consumidores se encontraron llenos de efectivo cuando la economía comenzó a reabrir. Además, persisten los problemas de suministro por la crisis logística.

La semana pasada el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional anticiparon el escenario. “El crecimiento mundial se desacelera fuertemente y lo hará aún más a medida que más países entren en recesión. Mi preocupación es ver que esta tendencia persista, con consecuencias a largo plazo devastadoras para los países emergentes y en desarrollo”, declaró el presidente del BM, David Malpass, en un comunicado.

Globalmente -el organismo- revisó a la baja las previsiones de crecimiento en todos los países.

¿Y qué pasa en Bolivia?

Mauricio Ríos García, analista financiero, dijo que se prevé que la recesión llegue a EEUU este último trimestre y se extienda a todo el mundo en 2023. “Esto se traduce en menor posibilidad de financiamiento para el mundo en general y sobre todo para economías emergentes, como Bolivia”. 

El experto dice que desde el último trimestre de 2021 se preveían estos resultados de recesión.

El economista José Gabriel Espinoza coincide con Ríos en que el financiamiento de mediano y largo plazo será más caro. “En el caso de Bolivia ya estamos pagando una tasa de cerca del 9% y es posible que nuestra deuda en el mercado privado sea más cara y si precisamos más dinero esta situación lo hace menos probable”.