La sede de Gobierno amaneció este jueves con un ambiente de 'tensa calma', tras el 'intento de golpe de Estado fallido' liderado, el miércoles por un grupo de militares liderados por el ex comandante del Ejército, Juan José Zúñiga.
Los cuatro accesos a la histórica Plaza Murillo, corazón político del país, se encuentran cerrados y custodiados por un fuerte contingente policial. Mientras que, en las inmediaciones del Palacio Quemado se observa un reducido grupo de personas que mantienen una vigilia en rechazo a los hechos ocurridos la tarde del miércoles.
En las afueras de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), donde se encuentra aprehendido el general Zúñiga a la espera de su audiencia de medidas cautelares, se desarrolla otra vigilia. Los presentes exigen que se aplique todo el peso de la ley al exmilitar y a los demás implicados en el asalto.
En la vecina ciudad de El Alto, sectores sociales se declararon en emergencia y convocaron a una movilización para este jueves a partir de las 8:00 de la mañana en el Cruce a Viacha, una de las principales vías de acceso a la urbe. La medida es liderada por juntas vecinales, representantes del transporte público y gremiales.