Un paro de 24 horas, este jueves 25 de agosto, es la medida de presión que ha determinado la Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud Pública (Fesirmes) en demanda del cambio inmediato del secretario municipal de Salud, Roberto Vargas, a quien sindican de haber vulnerado los derechos de los profesionales de la salud y de amedrentarlos; además denuncian la falta de medicamentos, insumos, equipos y, en algunos casos, infraestructura en los centros de salud que dependen del Municipio.
Sergio Echazú, secretario ejecutivo del Fesirmes, manifestó que si bien este lunes han recibido la invitación del alcalde, Jhonny Fernández, para una reunión de coordinación -en horario fuera de oficina-, no asistirán.
El Alcalde invitó al Fesirmes a una reunión este martes 23
Fundamentó su decisión indicando que ellos le enviaron -con anterioridad- tres notas de invitación a reunión pero que, al alcalde, “no le ha dado la regalada gana de ir a la casa de los profesionales bata blanca, que brindan atención de primera línea”. Cuestionó que, sin embargo, el burgomaestre hubiera asistido a reuniones con otros sectores en coliseos, pero no aceptó reunirse con ellos. “Está claro que no le interesa”, afirmó. El Fesirmes enviará su respuesta escrita con su negativa a la invitación.
Echazú indicó que la falta de medicamentos ya se veía venir. Tal es así que, hace dos meses, los gerentes técnicos de las redes de salud enviaron un informe en el que manifestaban que el desabastecimiento ocurriría. Como respuesta solo les dijeron que las medicinas estaban siendo licitadas. El médico observó que esa es una respuesta frecuente: “Hace un año están en licitación”, señaló.
Este fin de semana tanto Vargas, como Fernández, mostraron que los medicamentos no faltaban en los centros de salud municipales. Echazú por su parte, dijo que según el informe que recibieron del Comité de Crisis de su institución, en algunos centros de salud los almacenes fueron deschapados para sacar medicamentos y “acarrearlos” a otros; que los profesionales de salud fueron amedrentados y amenazados, y que la Ley de medicamento fue vulnerada.
Para el Fesirmes la acción fue un “show del lcalde”. Y añadió: “Es el colmo que el alcalde esté intentando tapar irregularidades y negligencias administrativas”.
Vargas manifestó que las acusaciones de amedrentamiento y amenazas son falsas. “No he hablado con ninguno de ellos”, indicó refiriéndose al Fesirmes. Sobre el fin de semana, manifestó que visitó el hospital Francés y que, tanto la subdirectora como la jefa de farmacia, lo estaban esperando. “Yo llegué con la prensa, di las notas y de ahí me fui al (centro de salud) Elvira (Wünderlich)”, dijo, a tiempo de indicar que en su secretaría siempre ha velado por el respeto a las personas.
“Es increíble lo que ponen en sus notas y sus acusaciones falsas; yo, desde que entré, estoy tratando de que haya mejor atención en hospitales y redes; creo que en hospitales he logrado un mejor resultado”, expresó el secretario municipal de Salud.